martes, 14 de octubre de 2014

SEÑALES ANTES DEL FIN

SEÑALES



Si examinamos bien los acontecimientos, en el entorno de nuestro complicado mundo, vislumbraremos el momento en que nos hallamos respecto de los últimos tiempos. Todas las señales apuntan a un final muy cercano de la historia de la Humanidad. Algunas importantes profecías bíblicas de El Apocalipsis parecen alcanzar su cumplimiento definitivo, y el retorno de Jesucristo se prevee más cercano de lo que pensamos. 

El Señor Jesús afirmó que nadie sabe el día ni la hora en que vendrá el fin (Mateo 24:36). Sin embargo, cuando habló sobre las señales previas antes del fin, advirtió a su pueblo: «Cuando anochece, decís: Buen tiempo; porque el cielo tiene arreboles. Y por la mañana: Hoy habrá tempestad; porque tiene arreboles el cielo nublado. ¡Hipócritas! que sabéis distinguir el aspecto del cielo, ¡mas las señales de los tiempos no podéis!» (Mateo 16:2,3). Si bien en el texto leído Jesús se dirigía a los religiosos de la época, no obstante siguiendo la enseñanza bíblica para el día de hoy, hemos de intentar nosotros distinguir las señales de los tiempos, es decir, las señales relativas a la política, la ciencia, la religión, los acontecimientos históricos, etc., para concluir en qué situación nos hallamos respecto del fin, y prepararnos así para el glorioso regreso de Jesucristo, que muy pronto vendrá para buscar a su amada Iglesia. «De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama está tierna, y brotan las hojas, sabéis que el verano está cerca. Así también vosotros, cuando veáis que suceden estas cosas, conoced que está cerca, a las puertas» (Marcos 13:28,29). 

La mayoría de la gente no lo sabe, pero existe una verdadera conspiración mundial. Desde hace mucho tiempo se sigue una agenda oculta, un plan diabólico y secreto, que incluye un programa minuciosamente planificado, y que está desarrollándose hoy bajo tres áreas donde opera Satanás en nuestro mundo: el área económica representada por el
«dios Mammón» (Lucas 16:13), que es el que controla a las demás áreas; el área política o legal, representada por «el príncipe de este mundo» (Juan 14:30); y el área religiosa, representada por «el dios de este siglo» (2 Corintos 4:4). La finalidad de Satanás, a quien se le asigna estos tres títulos (económico, político y religioso), es unificar a las naciones y establecer un Nuevo Orden Mundial, que permita de una forma natural dar paso al Anticristo.

De manera que, por los datos recogidos en esta sección, afirmamos que existe una agenda oculta, con fechas, sucesos, lugares…, esto es, un programa secreto que muy pocos conocen, pero que gracias a Internet hoy podemos dilucidar en gran medida. Este proyecto, diseñado estratégicamente por el diablo, es conscientemente desarrollado, guiado y controlado, por las personas y entidades más poderosas de este mundo. La Biblia afirma que el artífice principal de este engaño es 
«la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero» (El Apocalipsis 12:9).

«Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas; porque vergonzoso es aun hablar de lo que ellos hacen en secreto» (Efesios 5:11,12). ¿Sabía Ud. que existen organizaciones secretas muy poderosas, de donde han salido varios presidentes de América y también de Europa, así como diversos cargos importantes en buena parte del mundo...? En su versión actual, estas sociedades (Calavera y Huesos, Club Bilderbeg, Club de Roma, Cruz del Malta, entre otras…) son a la vez dirigidas por la llamada Gran Logia, la Masonería, que al tiempo es financiada y controlada por el poder económico de varias familias ricas y poderosas que hacen y deshacen a su antojo. Es el grupo de la llamada Elite, descendientes de los sionistas por religión kabalística judía (religión esotérica) y seguidores de los protocolos de Zión. Estos clanes familiares son los dueños prácticamente de todos los grandes bancos del mundo y entidades financieras. También controlan las organizaciones políticas, económicas y militares: el Banco Mundial, la ONU, la OMC, el FMI, la OTAN, la CIA, el FBI, El Pentágono, Comisión Trilateral, la OMS, la FDA, la NASA, etc. Por otro lado, manipulan y controlan los más importantes canales de información, programas de TV, el cine, las grandes compañías discográficas, los alimentos, la educación, las tecnologías, los grandes laboratorios farmacéuticos, etc. De hecho, las mayoría de corporaciones y empresas más importantes del mundo forman parte de su gran monopolio. No es de extrañar la declaración de Satanás cuando tentó a Jesús: «le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares» (Mateo 4:8). 

En cuanto a la religión, financian y controlan el Vaticano, el Concilio Mundial de Iglesias, los grandes shows evangelísticos y televisivos, el Islam, la Nueva Era, y demás importantes corrientes religiosas del mundo. Engañan al mundo con falsa información, como la llegada a la luna, el cambio climático, la presencia de ovnis o extraterrestres, el SIDA, enfermedades inventadas, y otros varios. Deciden las crisis de los países y las guerras, provocan los terremotos, tsunamis, el hambre y la desigualdad en el mundo, entre otros desastres… Son, en definitiva, los que establecen las reglas del juego, con las que planean, organizan, y dictaminan el destino de la Humanidad. A saber, gozan de inmunidad absoluta por parte de la justicia y los gobiernos, estando por encima de la Ley. La Biblia los llama «inicuos» = grg. anomos =sin ley (2 Tesalonicenses 2:9). Su objetivo final es gobernar el mundo entero, bajo un solo líder: el Anticristo.




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